Future Proof
Del término en inglés future-proof, se deriva el concepto prueba del futuro. Es el proceso de anticipar el futuro implementando métodos para reducir al mínimo los efectos de depreciación que conllevan las nuevas tendencias. En cuanto al desarrollo tecnológico, estos efectos a menudo recaen en el rediseño.
Cuando diseñamos una interfaz de usuario, estamos plenamente conscientes que está destinada a cambiar o evolucionar después de un período relativamente corto de tiempo.
Es muy probable que casi todos los sitios web o aplicaciones de ahora tengan poco o ningún parecido si se miran en 5 años.
Sin embargo nos esforzamos de forma natural por que nuestro trabajo sea admirado durante mucho tiempo en el futuro. Tenemos que aspirar a diseñar y construir cosas hermosas que perduren. Y eso no significa que la interfaz de usuario no pueda evolucionar y adaptarse a las nuevas circunstancias. Esto significa que podría seguir siendo una reminiscencia del diseño original. Debemos esforzarnos por dar ese salto y aspirar a soluciones a largo plazo, porque en última instancia ayudará a mejorar nuestros diseños.
Un ejemplo de buen diseño en relación al future-proof es iOS, el sistema operativo de Apple para dispositivos móviles. Una década después de ser creado el diseño de la interfaz apenas ha cambiado.